jueves, 21 de noviembre de 2013

¿Nos vemos?


Tu pregunta de vez en cuando me causa molestia,
Y es que eso de vernos no tiene algún sentido.

Si verte en verdad pudiera ocurrir en cualquier instante,
El lugar puede ser inclusive impredecible, el momento
ser infinito, pero seamos sinceros
Tu propuesta de vernos no sólo implica proyectarnos
El uno al otro.

El vernos que tú expones va más allá,
Más allá de mirarnos y contemplarnos.
De reconocernos, entre la multitud como dos palabras
Del mismo contexto.

¿Nos vemos? Realmente no tiene nada ver con la acción
Que presenta la palabra, sino un profundo sentimiento
De encontrarnos y comenzar a conocernos,
Como dos seres nunca antes vistos.

Sintiéndonos, latiendo en un ritmo constante
Y fluyente
Tocando texturas indefinidas de superficies
Irreconocibles.

Vernos, sí vernos a fin de cuentas,
Con lívidas sonrisas,
Con pechos calientes,
Con tan sólo vernos.

En definidas cuentas, tú no quieres que nos veamos,
Tu propuesta entonces sabemos llega como una invitación
Pobre ante lo  reconocido.

Por eso ruego no pidas que nos veamos,
Cuando tú sabes que más allá de tu enunciado

Existe algo más.

viernes, 8 de noviembre de 2013

Volver

Cerró rápidamente la puerta de su cuarto, con el corazón agitado y sin voltear al interior del lugar. Se sentó en aquella cama sucia y llena de cobijas, tratando de calmarse un poco. Llevaba ya días en aquel hotel con esplendida vista a la ciudad, había elegido esa habitación por encontrarse en la planta más alta y así observar los destellos nocturnos al regresar, pero esa noche no fue su prioridad. Sentía aun sus manos temblar, el aire de sus pulmones salía con aceleración y comenzaba sentir el cansancio en sus piernas. Estaba recobrando la estabilidad de sí misma.

Cayó de un golpe sin pensar en nada, las gotas de sudor se secaban en su rostro y una ligera brisa comenzó a caer afuera. El silencio parecía invadir la atmosfera, pero había algo que le seguía perturbando, era un minúsculo ruido de pisadas. Pensó, podrían ser sus nervios aun inestables, pero cada vez incrementaba la intensidad del caminar. De nuevo comenzó a tener pavor al escuchar aquellas pisadas. Era un caminar lento y pesado y poco a poco iba siendo más próximo a la puerta de su cuarto.

Se levantó rápido del colchón. Temía, y temía tanto que no sabía qué hacer, sólo trataba de tener alguna insignificante ventaja. Corrió en su pequeño cuarto buscando algún elemento con qué defenderse. Los pasos dejaron de oírse, ella se acercó a la puerta para asegurarse que todo había sido parte de su imaginación.

El silencio apareció otra vez, pero de lado contrario al interior del cuarto, alguien lo interrumpió tocando la portezuela de madera. Ella dio un gran paso atrás, tapó su rostro e intentó calmarse, pero de nuevo tocaron la puerta ahora con mayor vigor y hubo una tercera llamada aun más fuerte.

Estaba horrorizada y llena de pánico y entre aquella incertidumbre que la abordaba reaccionó de manera inconsciente corriendo hasta el final del cuarto, pasando el balcón mirando por última vez la ciudad brillar.

http://www.youtube.com/watch?v=ObO9rVFfSoY
, Chihuahua